¿QUÉ ES UN MANDALA?

El mandala tiene su origen en India y su nombre en sánscrito significa “círculo o rueda”, pasando a representar su característica básica, aunque pueden ser de diferentes formas incorporando todas las figuras geométricas.

Para los Budistas, su función es la meditación. No obstante, el proceso más importante para ellos es la “creación” de éstos por ser un camino “recorrido” que muestra las vivencias del momento de quien lo diseña y siendo la vía de conexión entre el hombre y la divinidad, tanto en el proceso de creación,  al tenerlo para observación o como adorno.

“Desde el punto de vista espiritual es un centro energético de equilibrio y purificación que ayuda a transformar el entorno y la mente de quien medita en ellos”.

Dibujar o pintar mandalas es una terapia que se está usando cada día más. Su diseño es libre y su significado dependerá de sus formas y colores.

FORMAS Y SIGNIFICADO:

Círculo: lejanía pero también seguridad, lo absoluto y el verdadero “yo”.

Cuadrado: equilibrio y estabilidad.

Triángulo: relacionado con el agua, la transformación y vitalidad.

Espiral: energías curativas

Cruz: símbolo de decisiones y se relaciona con los puntos cardinales.

Corazón: la unión, el amor, la felicidad.

La estrella: relacionada con la libertad y espiritualidad.

Pentágono: representa los símbolos de la tierra, agua y fuego, así como la forma del cuerpo humano.

Hexágono: equilibrio y unión de los contrarios.

Mariposa: relacionada con la transformación, muerte y la auto renovación del alma.

Laberinto: confusión, autorreflexión y la búsqueda del centro de uno mismo.


SIGNIFICADO DE LOS COLORES

Negro: relacionado con la tristeza, la muerte, lo profundo, la ignorancia y el misterio.

Blanco: purificación, iluminación. Es el color de la perfección. De la nada o el todo por hacer.

Verde: relacionado con la naturaleza, esperanza, crecimiento, felicidad y libertad.

Azul: paz, alegría, serenidad y satisfacción.

Gris: calma, espera, neutralidad, sabiduría y renovación.

Rojo: energía pura vital, pasión y sensualidad.

Naranja: energía, dinamismo, ternura, valor y ambición.

Amarillo: simpatía, color del sol y la luz.

Rosado: altruismo, dulzura, paciencia.

Morado: contemplación, amor al prójimo. Idealismo y sabiduría.

Violeta: transformación, magia, espiritualidad e inspiración.

Plateado: capacidades psíquicas, emociones fluctuantes.

Dorado: sabiduría y lucidez.

Fuentes: www.yogayvidasana.com


Cesta

La cesta está vacía.